Los países europeos son tan culpables como los traficantes de personas
En el año 2001, un amigo palestino trató de llegar a Europa.
Provisto solo de un documento de viaje para refugiados palestinos en Líbano –uno de los papeles más inútiles del montón que existe- apeló a un grupo mafioso turco de Estambul que le prometió un pasaje a Grecia a cambio de 1.000 dólares.
Así comenzó una especie de odisea en la cual enbarcaron a mi amigo en una serie de barcos abarrotados. El primero se rompió frente a la costa de Turquía, el segundo se hundió y el tercero depositó su carga humana cerca de la ciudad turca de Izmir. A los migrantes les dijeron que estaban en Grecia.
Seguir leyendo: rebelion.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario