La construcción de la violencia brota también con la arquitectura material de la dominación. A veces es el diseño urbano el que define y, desde luego, sistematiza, la violencia y la coacción.
Control militar israelí en la ciudad vieja de Hebrón-Cisjordania (Foto: Aljazeera)
Sobre esta premisa —mire usted el paisaje de la ciudad que habita y extraiga conclusiones: vallas, paredes, cámaras de vigilancia, señales luminosas, adminículos añadidos al pavimento para restringir la velocidad, líneas pintadas sobre el suelo, provocadores mensajes coactivos, otros que fomentan la delación y la vigilancia desconfiada contra el vecino…—, nace una revista, The Funambulist, dedicada a la política del espacio y el cuerpo.
El número uno ya está a la venta en papel (12 euros) y en versión digital (6 en un archivo descargable en formato PDF). Es bilíngüe inglés-francés y algunos de los contenidos son de acceso gratuito en el blog de la publicación —embrión, desde hace cinco años, de la idea que ahora se reconvierte— y en Archipelago, el podcast asociado.
Seguir leyendo: palestinalibre.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario