Los plazos y el ritmo del caso Bárcenas van camino de generar un serio contratiempo al Partido Popular. En Moncloa y Génova confiaban en que el procedimiento que investiga su presunta financiación irregular fuera elevado a juicio oral antes de final de año para evitar que las acusaciones de corrupción se colaran en la campaña de las elecciones europeas del próximo mes de mayo, prueba de fuego de las generales de 2015.
Las esperanzas del PP se agarran a la contundencia de las pruebas contra elextesorero Luis Bárcenas y la supuesta ausencia de indicios contra otros responsables y exdirigentes del partido. De hecho, la Agencia Tributariaconcluye en las últimas diligencias enviadas al Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional que, en caso de que las anotaciones de Bárcenas fueran ciertas, ninguno de los cargos del PP que aparece mencionado en ellas habría cometido delito fiscal al no haber recibido más de 120.000 euros en un mismo ejercicio, el mínimo que fija ley para poder imputar ese tipo delictivo.
Sin embargo, la fase instrucción está lejos de cerrarse. Fuentes cercanas a la investigación consultadas por este diario aseguran que las pesquisas aún tienen por delante un largo recorrido y que es prácticamente imposible que dé tiempo a terminar la instrucción antes del próximo verano. Salvo giro inesperado del procedimiento, el magistrado que dirige la investigación, Pablo Ruz, seguirá recibiendo documentos sobre la presunta trama de financiación paralela del PP en plena disputa electoral.
Pruebas por entregar
Por un lado, aseguran estas fuentes, Ruz aún no ha recibido todas las diligencias que ha solicitado desde que decidió abrir esta pieza separada del caso Gürtel el pasado mes de marzo. Esas diligencias, entre las que figuran pruebas decisivas para el caso, como un informe de la Agencia Tributaria y periciales de la Policía Judicial, requerirán semanas para ser concluidas.
Este mismo jueves, por ejemplo, Ruz ha pedido al Banco Santander que remita a su juzgado todos los documentos que tenga en los que aparezca la firma del extesorero del PP Álvaro Lapuerta para cotejar esas rúbricas con las que figuran en los papeles de Bárcenas. Una vez recopilados esos documentos, tendrán que ser analizados por peritos calígrafos. Después, sus conclusiones serán remitidas a Ruz, que a su vez deberá dar luego traslado a las partes. Así con todas las diligencias.
El extesorero del pp lapuerta declara hoy sobre la supuesta caja b del ppEl otro factor que según fuentes cercanas a la investigación obligará a rebasar el límite que barajaba el PP es la lentitud de la colaboración extranjera. Estados Unidos y Reino Unido aún tienen que remitir información solicitada por Ruz a través de comisiones rogatorias centradas sobre todo en el rastro del dinero del extesorero. También hay pendiente un envío de datos procedente de Suiza que será crucial para la evolución del caso. Precisamente estos días se encuentra en la confederación helvética una comisión judicial liderada por el propio Ruz para tratar de recabar más pruebas.
Cuando estén listas, serán remitidas al Ministerio de Justicia y de ahí pasarán a la Audiencia Nacional, que a su vez deberá dar de nuevo traslado a las partes. La información conseguida en el extranjero, además, puede dar lugar a la petición de nuevos informes a la Policía Judicial de la Policía Nacional, la institución que está liderando las pesquisas.
Aplazamiento de la Convención
En este escenario, las fechas que maneja Génova son inviables. La formación iba a celebrar su Convención Nacional durante el último trimestre de 2013. Finalmente, ha acordado retrasarla al mes de enero aduciendo "problemas de agenda". Pero lo que en realidad hay tras esa decisión es un intento de alejar un acto tan decisivo para las aspiraciones del Gobierno y el PP -tiene que nombrar líder del partido en Andalucía y cabeza de lista para las europeas- del goteo pertinaz de informaciones relacionadas con Bárcenas. Con todo, el caso va a echarse encima de esa cita.
Las acusaciones populares también van a contribuir a alargar el proceso. Por lo pronto, van a solicitar a Ruz que apruebe nuevas diligencias para tratar de demostrar que los papeles de Bárcenas encierran un delito de cohecho, un trámite que puede realimentar la instrucción y retrasar un pronunciamiento de Ruz sobre el futuro del caso. En concreto, las acusaciones quieren que el magistrado solicite informes de contratación de obras ejecutadas por los autores de las presuntas donaciones irregulares al PP para averiguar si hay vínculos entre los pagos al partido y las adjudicaciones que consiguieron.
Fin de la instrucción de la pieza principal
No se encuentra en la misma situación la pieza principal del caso Gürtel. Fuentes cercanas a ese procedimiento consultadas por El Confidencialaseguran que Ruz dará por concluida la instrucción el próximo mes de noviembre para dar paso a la fase de vista oral. El trámite se producirá de este modo antes de que expire en diciembre la prórroga de seis meses que elConsejo General del Poder Judicial (CGPJ) concedió a Ruz para que siguiera instruyendo el caso.
La pieza principal aún está pendiente de información procedente de comisiones rogatorias, y el propio Ruz pidió hace sólo unos días a la Comunidad de Madrid que aportara más información sobre 71 expedientesde contratación relacionados con las empresas de los presuntos líderes de la trama Gürtel: Francisco Correa, Álvaro Pérez y Pablo Crespo. Sin embargo, las fuentes contactadas aseguran que el magistrado ya ha decidido poner fin a la fase de instrucción de este caso, cuatro años y medio después de que Baltasar Garzón lo iniciara.

El Confidencial